La angioOCT (OCTA) es una nueva modalidad de imagen que permite realizar un estudio del flujo sanguíneo dentro de las estructuras vasculares del ojo sin necesidad de colorantes intravenosos. Esta nueva técnica de imagen se esta empleado principalmente en la patología vascular retino-coroidea (DMAE exudativa, neovascularización miópica, retinopatía diabética, obstrucciones vasculares, etc.), pero extiende sus indicaciones a la patología del nervio óptico y las enfermedades del segmento anterior.

La OCTA ofrece varias ventajas comparadas con la angiografía convencional (AFG). La naturaleza no invasiva y la rápida adquisición permite repetirla frecuentemente y evitar los riesgos potenciales asociados a inyección intravenosa de colorante. Además, la OCTA permite obtener imágenes de alta resolución de la vascularización, y seleccionar distintos planos de la vascularización de la retina y la coroides. Sin embargo, la OCTA tiene desventajas sobre la AFG tradicional, como la  ausencia de información funcional sobre la velocidad de relleno o la severidad de la fuga de colorante, así como los campos de visión reducidos  y la ausencia de visión estereoscópica.

Pero, ¿realmente la OCTA ha desbancado definitivamente a la AFG?. En esta presentación  intentaremos dar respuesta a esta cuestión

Cuando nos planteamos la validez de una nueva prueba diagnóstica debemos valorar la validez, la reproductibilidad y la seguridad de la prueba, así como otros aspectos como el coste, rapidez de adquisición, incomodidad y posibles efectos secundarios.

• Validez: la sensibilidad y especificidad.
• Reproductibilidad: la capacidad de un test para ofrecer los mismos resultados cuando se repite en circunstancias similares.
• Seguridad: la seguridad viene determinada por el valor predictivo de un resultado positivo o negativo.

¿Existe evidencia de la validez diagnóstica de la OCTA frente a la AFG en las enfermedades retinianas?. Para responder a esta pregunta realizamos una revisión actualizada de la literatura científica que compara los hallazgos de la AFG y la OCTA en las enfermedades vasculares de la retina más prevalentes: DMAE exudativa (neovascularización tipo 1, tipo 2, tipo 3), miopía, retinopatía diabética y oclusiones vasculares.

 

OCTA en DMAE exudativa con neovascularización tipo 1.

 

OCTA en coroiditis con neovascularización tipo 2.

OCTA en Obstrucción de rama venosa retiniana.

 

OCTA en retinopatía diabética: aumento ZAF.