ARTÍCULO ORIGINAL
Boletín de la Soc. Oftalmo. de Madrid - N.º 45 (2005)

Cirugía ocular con uno o dos oftalmólogos: estudio comparativo

Dr. Grande Baos C1

1  Doctor en Medicina y Cirugía. Especialista en Oftalmología y Coordinador de Calidad del Hospital Universitario de Santa Cristina. Madrid.

Resumen

Objetivos: Analizar la cirugía oftalmológica realizada con uno o con dos cirujanos, establecer las condiciones necesarias para la cirugía en solitario, hacer un estudio comparativo entre ambas y proponer un minitest para ayudar en la decisión ante una propuesta de operar sin ayudante.

Material y método: La experiencia acumulada en las dos fases de mi carrera profesional, 12 años operando con ayudante y 6 años de cirugía en solitario.

Resultados y discusión: Los requisitos básicos son la experiencia y el dominio de la técnica, el autocontrol emocional y la formación y disposición del equipo de enfermería. El mayor inconveniente es la indisposición repentina del cirujano y la mayor ventaja es el incremento del rendimiento quirúrgico. Terminamos proponiendo un minitest de 5 preguntas para ayudar en la toma de decisiones.

Palabras clave: equipo quirúrgico-oftalmología, cirujano-oftalmología, productividad, rendimiento- quirófano de oftalmología.

 

Summary

Objective: To analyze the ocular surgery carried out with one or with two surgeons, to establish the necessary conditions for the surgery alone, to make a comparative study among both and to propose a minitest to help in the decision before a proposal of operating without assistant.

Material and method: The experience accumulated in the two phases of my professional career, 12 years operand with assistant and 6 years of surgery alone.

Results and discussion: The basic requirements are the experience and the control of the technique, the emotional self-control and the training and the disposition of the nursing team. The bigger objection is if the surgeon fall ill suddenly and the greater advantage is the increment of the surgical performance. We finish proposing a minitest of 5 questions to help in the taking of decisions.

Key words: surgical team-ophthalmology, surgeon -ophthalmology, productivity, performance-surgical room of ophthalmology.

Introducción

Muchas veces nos preguntamos si se puede poner en riesgo la calidad por el aumento del rendimiento ocasionado por la incesante demanda de intervenciones quirúrgicas (1). Evidentemente, una forma fácil de duplicar las intervenciones con el mismo personal facultativo (oftalmólogo y anestesista) es que se asigne un anestesista para cada dos quirófanos de oftalmología donde está operando un solo oftalmólogo. También podría compartirse la enfermera circulante (no es nuestro caso) y la auxiliar.

Como no he encontrado estudios comparativos en la historia de la oftalmología ni tampoco legislación actualizada (2,3), me he planteado aprovechar mi experiencia y hacer un estudio comparativo entre ambos para intentar establecer en qué circunstancias se puede operar sin cirujano ayudante y terminamos proponiendo un minitest para saber si debemos operar en solitario o no.

Material y métodos

Analizamos dos fases en la vida profesional, una primera de 12 años, en diferentes hospitales de España donde se seguía el patrón clásico: 2 oftalmólogos, 1 anestesista, 2 enfermeros y 1 auxiliar y que la casuística se resume en la tabla I. La segunda fase de 6 años en el hospital donde trabajo ahora, en que el equipo quirúrgico está constituido por 1 oftalmólogo, 1/2 anestesista (compartido en dos quirófanos adyacentes), 2 enfermeros y 1/2 ó 1/3 de auxiliar y que la actividad se recoge también en la tabla I.

En este estudio nos fijamos en la posibilidad de que la intervención pueda realizarse sin un incremento sustancial sobre los tiempos típicos en una intervención clásica (tabla II), en las características de la infraestructura del quirófano y en las características del personal sanitario. Para ello nos hemos servido del análisis de las dificultades de adaptación al método de nuestro hospital por parte de las personas que se incorporan transitoria o definitivamente al equipo.

Resultados y discusión

Es imprescindible que el cirujano oftalmólogo tenga experiencia y conocimiento de la técnica quirúrgica así como del manejo de las complicaciones y debe ser capaz de incluir unas mínimas modificaciones en la técnica habitual (suturas continuas mejor que puntos sueltos, colocación de la cabeza para evitar encharcamientos del campo quirúrgico, técnicas exsangües con una correcta hemostasia, empleo más frecuente de la mano no dominante, modificación de algún instrumento, .). Pero además tiene que tener un mejor autocontrol de sus emociones, y para ello es importante (4):

Aunque no imprescindible, sí es deseable que el personal de enfermería sea experimentado, que use el visor del microscopio para seguir la intervención y que «viva la cirugía», circunstancia esta última, que permite ejercer de psicoterapeuta para el cirujano y para el paciente. También ayuda mucho que el paciente sea colaborador, sobre todo entre los que empiezan.

El valor añadido lo aportaría el reconocimiento por parte de los gestores del esfuerzo realizado, el apoyo del coordinador de calidad para comprobar que los indicadores de calidad se mantienen y que el paciente no corre riesgos y, que la remuneración estuviese de acuerdo con el rendimiento (5,6).

Vamos a terminar con el estudio comparativo de los inconvenientes y las ventajas de la «cirugía en solitario» (7):

Inconvenientes:

Ventajas

Para finalizar y a la vista de todo lo expuesto, proponemos un minitest para saber en qué condiciones y circunstancias pensamos que se debe aceptar una cirugía en solitario. Se compone de 5 preguntas que se responden sí / no y al final se hace un recuento de síes:

  1. ¿La oferta es voluntaria y no estás condicionado por ninguna presión?
  2. ¿La aceptación es juiciosa y has analizado tus aptitudes?
  3. ¿Todo el equipo está preparado ?
  4. ¿El proceso está ultimado y no está en fase de implantación para nadie?
  5. ¿La gerencia está sensibilizada y va a reconocer vuestro esfuerzo?

Resultados:

- 0-1 sí: Rechazar la propuesta.
- 2-3 sí: Negociar la propuesta.
- 4-5 sí: Aceptar la propuesta.

Bibliografía

  1. Ellis RP. Creaming, skimping, and dumping: provider competition on the intensive and extensive margins. J Health Economics 1998; 17: 537-555.
  2. Peiró S. Comparación de resultados en la asistencia sanitaria. In: Lázaro P, Marín I, Ed. Evaluación de la calidad de la asistencia sanitaria. Madrid: SmithKline Becham. 1998; 119-138.
  3. Cots F, Carasusan MG, Castells X. Asignacion de tiempos médicos a tareas no asistenciales. X Jornadas de Salud Pública y Administración Sanitaria. Escuela Andaluza de Salud Pública. Granada 1995.
  4. Residency Training Manual. Department of Ophthalmology. The University of British Columbia and Affiliated Hospitals 2004/2005.
  5. Sánchez-Cantalejo E, Ocaña Riola R. Los modelos multinivel o la importancia de la jerarquía. Gaceta Sanitaria 1999; 13: 391-398.
  6. Dukett SJ. Hospital payment arrangements to encourage efficiency: the case of Victoria , Australia . Health Policy 1995; 34: 113-134.
  7. Iezzonni LI. The risk of the risk adjustment. JAMA 1997; 278: 1600-1607.